Los medicamentos aplicados
directamente en la piel son el primer curso de las opciones de tratamiento.
Los
principales tratamientos tópicos son los corticoides (cortisona como cremas,
geles, líquidos, aerosoles, o ungüentos), vitamina D-3 derivados, alquitrán de
hulla, antralina, o retinoides.
No existe un
medicamento tópico que sea el mejor para
todas las personas con psoriasis. Debido
a que cada fármaco tiene efectos adversos específicos o pierde potencia con el
tiempo, es común que cambien. A veces, las preparaciones tópicas
se combinan juntas.
Por ejemplo,
queratolíticos (sustancias utilizadas para descomponer las escalas o el exceso
de células de la piel) se agregan a menudo a estos preparativos.
Algunas
preparaciones nunca deben ser mezcladas entre sí debido a que interfieren entre
sí.
Por ejemplo, el ácido
salicílico inactiva la crema o ungüento de calcipotriol (una forma de vitamina
D-3). Por otro lado, los fármacos
tales como la antralina (extracto de corteza de árbol) pueden requerir la
adición de ácido salicílico para que trabajar eficazmente.
La piel es actualmente considerada como un órgano
más de nuestro cuerpo. La piel nos recubre totalmente y es nuestro contacto más visible con el mundo.
Desafortunadamente existen diversas enfermedades que pueden atacarla. Y una de ellas es la psoriasis. Si bien se la considera como una dolencia crónica, hoy en día existen múltiples métodos para controlarla. (más sobre esto, aquí)
Desafortunadamente existen diversas enfermedades que pueden atacarla. Y una de ellas es la psoriasis. Si bien se la considera como una dolencia crónica, hoy en día existen múltiples métodos para controlarla. (más sobre esto, aquí)